Los problemas de D. Davidson con la acción intencional :: Spanish Essays

Los problemas de D. Davidson con la accià ³n intencional ABSTRACT: Es este trabajo quisiera exponer las dificultades que el modelo de explicacià ³n de la accià ³n propuesto por Donald Davidson tuvo a la hora de explicar la intencià ³n. En su primer modelo, Davidson habà ­a explicado la accià ³n a partie de deseo y creencia, à ©stas no sà ³lo racionalizaban sino que tambià ©n causaban la accià ³n; y accià ³n e intencià ³n se identificaban. Sin embargo, Davidson repara posteriormente en que, por un lado, a veces el deseo y la creencia parecen tener como resultado la accià ³n y, sin embargo, no se da entre ellos la relacià ³n causal 'adecuada,' por lo que no podemos decir de la accià ³n que sea intencional. Son casos de cadenas causales irregulares o no està ¡ndar. Por otro lado, a veces tener un deseo y una creencia relacionada no nos conduce necesariamente a la accià ³n. Y, aà ºn en el caso de que nos conduzca a la accià ³n, à ©sta puede ser contraria a lo que nuestro mejor juicio nos dicta. Este es el problema de las con ductas irracionales. Ambos problemas causaron que introdujera algunos cambios en su modelo inicial. Sostengo que estos cambios no mejoraron el modelo. El problema de las cadenas causales irregulares no se resuelve, y el problema de las separacià ³n entre deseo-creencia y accià ³n se reformula en tà ©rminos là ³gicos, mediante un recurso tà ©cnico. En 1963, Donald Davidson publica un artà ­culo "Acciones, razones y causas" que significà ³ la reunificacià ³n de dos modelos de explicacià ³n tradicionalmente separados: el racionalista, segà ºn el cual las razones explican la accià ³n porque la justifican; y el causal, que mantiene que la accià ³n sà ³lo se explica mediante sus causas. El planteamiento de Davidson disuelve esa oposicià ³n: "la racionalizacià ³n [dice Davidson] es una especie de explicacià ³n causal ordinaria". (1) No tratarà © aquà ­ muchas de las crà ­ticas y problemas que suscità ³ y sigue hacià ©ndolo este planteamiento del tema, como la conexià ³n là ³gica que hay entre razà ³n y accià ³n o la necesidad de que exista una ley que respalde esa conexià ³n. Mi objetivo es observar si este modelo puede dar cuenta de la intencià ³n, de ese momento previo a la accià ³n. Los problemas que el tratamiento de la intencià ³n supusieron para el modelo causaron una reformulacià ³n de à ©ste. Estos problemas fueron (1) las cadenas causales irregulares o no-està ¡ndar (externas o internas); y (2) aquellos casos en los que o bien el deseo no conduce necesariamente a la accià ³n o bien los sujetos actà ºan en contra de su mejor juicio.